Un sentimiento de pesimismo me aborda estos días. Algo no propio de mi, pero tras el espectáculo presenciado el pasado domingo en la Romareda, me queda muy poca esperanza, aunque todavía perdura algún granito.
El domingo presencie un Zaragoza incapaz de poder ganar a uno de sus más directos rivales, un Zaragoza sn fuerza, sin fortuna, sin entusiasmo. Un Zaragoza que estuvo respaldado por su afición en todo momento.
Se vieron unos jugadores hundidos fisica y psicológimante, como si el mayor de los pesimismos formara parte de ellos.
Quedan 7 partidos, alguno de ellos contra rivales tan directos como el Recre, la semana que viene en la Romareda.
El Getafe, uno de los equipos revelación de la temporada, finalista de la Copa del Rey y hasta ayer superviviente de la UEFA, es el próximo rival del Zaragoza. Confío que tras el desgaste físico y psiquico que sufrieron ayer sus jugadores frente al Bayer de Munich, los blanquillos puedan arañar tres puntos del equipo madridista, unos puntos muy necesarios y creo que imprescindibles si todavía queremos seguir pensando en la salvación.
Será un partido duro y competitivo, pero tras lo visto ayer en el partido de cuartos de la UEFA, mucho tendrán que cambiar las cosas para poder conseguir una victoria a domicilio. Manolo Villanova anunciaba esta semana numerosos cambios en la zaga zaragocista, esperemos que sirva de algo.
Hay que ser conscientes que los máximos responsables de esta situación son los jugadores en primera persona, sin poder achacar responsabilidades a los cuatro entrenadores que han pasado por el banquillo de los leones esta temporada.
El domingo una afición ya cansada estará de nuevo con el equipo. Una afición que ha estado a las duras y a las maduras, y que a pesar de la desilusión que vive con el club de sus amores, mostrará el apoyo a sus colores hasta el último de los suspiros.
viernes, 11 de abril de 2008
sábado, 5 de abril de 2008
"El cuerpo (con)sentido: Una (re)presentación visual
"El cuerpo (con)sentido: Una (re)presentación visual es el título de la obra que estos días se expone en el Centro de Historia de Zaragoza.
Un paseo trascendental hacia la identidad del cuerpo es lo que numerosos artistas nos quieren mostrar estos dias en la capital aragonesa.
Los alumnos del master nos fuimos con las cámaras a grabar imágenes que luego nos ayudarían a elaborar un reportaje.
Una actividad muy complicada de la que se necesita una recapacitación previa de como mostrar en imágenes lo que allí estamos viendo.
La no identidad de las personas si estas no reconocen tu cuerpo es la idea principal con la que queriamos partir. La necesidad de que las personas que nos rodean nos reconozcan ya que sino, nuestro cuerpo no tiene identidad, e incluso siendo ese reconocimiento de una manera muy subjetiva.
Tras hacer nuestro trabajo durante cuatro horas en el museo, las secuencias que daban sentido a nuestro reportaje no existían, ya que debido a un fallo técnico de la cámara todo era un fundido negro...que ideaca!!!
Amablemente nuestros compañeros nos cedieron sus imágenes y pudimos hacer el montaje del reportaje pero erroneamente porque pretendimos realizar nuestro proyecto inicial con la falta de imágenes clave que sólo teníamos en la cámara que nosotros llevábamos.
Un sentimiento de rabia, decepción, impotencia y mucho mucho tensión fueron las sensaciones que nos abordarón al día siguiente al llegar a la edición y no poder mostrar la idea que teníamos y como queríamos montarla.
Tras salvar el bulto como pudimos, llega el momento de hacer "el reportaje".
Un paseo trascendental hacia la identidad del cuerpo es lo que numerosos artistas nos quieren mostrar estos dias en la capital aragonesa.
Los alumnos del master nos fuimos con las cámaras a grabar imágenes que luego nos ayudarían a elaborar un reportaje.
Una actividad muy complicada de la que se necesita una recapacitación previa de como mostrar en imágenes lo que allí estamos viendo.
La no identidad de las personas si estas no reconocen tu cuerpo es la idea principal con la que queriamos partir. La necesidad de que las personas que nos rodean nos reconozcan ya que sino, nuestro cuerpo no tiene identidad, e incluso siendo ese reconocimiento de una manera muy subjetiva.
Tras hacer nuestro trabajo durante cuatro horas en el museo, las secuencias que daban sentido a nuestro reportaje no existían, ya que debido a un fallo técnico de la cámara todo era un fundido negro...que ideaca!!!
Amablemente nuestros compañeros nos cedieron sus imágenes y pudimos hacer el montaje del reportaje pero erroneamente porque pretendimos realizar nuestro proyecto inicial con la falta de imágenes clave que sólo teníamos en la cámara que nosotros llevábamos.
Un sentimiento de rabia, decepción, impotencia y mucho mucho tensión fueron las sensaciones que nos abordarón al día siguiente al llegar a la edición y no poder mostrar la idea que teníamos y como queríamos montarla.
Tras salvar el bulto como pudimos, llega el momento de hacer "el reportaje".
Gonzalo Alonso, músico nacido en Granada pero de adopción aragonesa es el eje central del nuevo trabajo.
Los resultados materiales de nuestro reportaje se verá más adelante pero tampoco creais que muy adelante...porque nos hacen trabajar muy deprisa y con bastante tensión, pero bueno este es el mundo de los medios ¿no?.
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